Siguen las “fumigaciones” nauseabundas sobre el barrio de San Julián. Ayer, lunes 4 de abril de 2016, fueron sobre las 10 de la mañana, no hacía falta abrir las ventanas para “disfrutar” de los “deliciosos” olores, con el agravante de que una vez finalizado el “incidente operativo (?)”, los olores permanecían cuando eran las dos de la tarde. Una bendición del cielo (?) y nunca mejor dicho.
Aquí quedan las gráficas de los valores de contaminación detectados en la cabina del barrio; no son estos los únicos, pero para no cansar al personal se omiten:
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